2 jun 2014

Entrevista de Trabajo: ¿tienes todas las respuestas?

La entrevista de trabajo es uno de los momentos clave del proceso de selección. Una vez nuestro CV ha superado el primer filtro, la entrevista representa una gran oportunidad para dar a conocer nuestros conocimientos, experiencia y habilidades de manera personal. Además, nos permite conocer nuevos contactos y empresas de manera directa.

Por ello, conviene dedicar tiempo y atención a prepararnos para afrontar la entrevista, consiguiendo un impacto positivo de nuestra actuación como candidatos y profesionales.

¿Cómo preparar nuestras respuestas para no ser uno más?




Fase 1: Antes 

Análisis

Antes de acudir a una entrevista de trabajo habremos de investigar la compañía en la que se encuentra el puesto vacante, obteniendo información sobre su sector, actividad, volúmen de facturación, número de empleados, etc. Tanto internet como nuestra red de contactos pueden proveernos de gran información al respecto. Además, tendremos que considerar en detalle el puesto al que optamos. Analizando las funciones, responsabilidades y condiciones de trabajo en comparación con nuestro perfil y expectativas, podremos concluir qué aspectos nos convendrá destacar y/o clarificar. En este sentido, es aconsejable destacar especialmente nuestros puntos fuertes, aportando ejemplos de nuestra vida profesional. Evidentemente, esta fase de análisis de la oferta requiere de un analisis del propio perfil, valores y expectativas profesionales. Nuestro grado de autoconocimiento es lo que, en muchas ocasiones, marcará la diferencia entre nosotros y otros candidatos con un perfil similar.

Estas son algunas de las preguntas que podemos encontrarnos...




Habilidades de Comunicación

En la entrevista de trabajo no sólo será importante lo que digamos, sino también cómo lo hagamos. Por ello, antes de acudir a una entrevista cobra especial relevancia el practicar o "ensayar" la comunicación de nuestro mensaje. Habitualmente, utilizar un discurso sencillo, claro y concreto ayuda a que ganemos en impacto y persuasión.

Otro elemento que influye en cómo transmitimos nuestro mensaje es la comunicación no verbal. Es decir, todos aquellos aspectos paraverbales que acompañan nuestras palabras. Nos referimos aquí al contacto visual, tono de voz, gestos, postura corporal, etc. Tomando como premisa el axioma de P. Watzlawick "es imposible no comunicar", es importante tomar conciencia de nuestra comunicación no verbal y evaluar el impacto que esta tiene en el interlocutor. Para ello, el feedback de contactos de confianza y la autobservación nos serán de gran ayuda. 


Fase 2: Durante 

Una buena preparación suele contribuir a que nos sintamos más confiados y rejados durante la entrevista,¡lo que ya es un buen comienzo!
He aquí otras sugerencias que podemos poner en práctica durante la entrevista:

- Cuida tu presentación: tanto tu imagen (vestimenta, estilo, etc.) como tu lenguaje y vocabulario dicen mucho de ti como profesional. 
- Armoniza tu lenguaje no verbal con el de interlocutor adecuando especialmente tu tono de voz y ritmo en el habla. Esto contribuirá a generar un clima cómodo y agradable para ambos.
- Escucha atentamente las preguntas sin interrumpir, y haz una pausa de unos segundos antes de responder. Esto te ayudará a ordenar brevemente tus pensamientos y a que la comunicación sea más consciente e intencional (evitando las malas pasadas que los nervios suelen jugarnos).
- Pregunta aquellos aspectos que consideres importantes cuando el interlocutor te invite a ello, o cuando sea adecuado dentro de la conversación. Recuerda que lo que preguntas y cuándo lo haces también da una idea de tus intereses y prioridades.
- Agradece su tiempo a tu entreviatador y asegúrate de tener claro cuál es el siguiente paso en el proceso.


Fase 3: Después

Auto-feedback: Al término de una entrevista es interesante que nos preguntemos qué momentos de la misma han transcurrido de forma positiva y cuáles no tanto. Evaluarnos a nosotros mismos señalando aspectos que podemos mejorar nos ayudará a tenerlos en cuenta en próximas ocasiones. De igual forma, será importante darnos cuenta de qué aspectos hemos aborado de forma cómoda, segura y positiva, para mantenerlos y reforzarlos en un futuro.

Tras una entrevista es muy conveniente realizar un seguimiento para interesarnos por el resultado de la misma y conocer nuestro estado como candidatos. Dejando transcurrir un tiempo razonable, podemos contactar con nuestra persona de contacto para obtener información. Nuevamente, se trata de otra ocasión para manifestar nuestra motivación y actitud positiva.








2 comentarios:

  1. Gràcies Maite. Tindrè l'oportunitat de posar en pràctica els teus consells avui mateix.

    Mònica

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